A esta hermosa planta se le conoce como Violeta africana, y su nombre científico es Saintpaulia ionantha. Familia de las Gesneriáceas. Es originaria de las zonas tropicales del África Cental. La capacidad para producir abundantes y coloridas flores, casi en cualquier época del año, han convertido a la Violeta africana en unas de las plantas con flor para interior más populares que existen. El grupo está integrado por aproximadamente una docena de especies perennes.

Características

La Violeta africana o Saintpaulia ionantha es una planta herbácea de reducidas dimensiones que apenas alcanza los 15 cm de altura. Las hojas son carnosas, aterciopeladas, de color verde intenso y están dispuestas en roseta de manera compacta.

Violeta africana (Saintpaulia ionantha)

En el centro de la roseta nacen las flores en forma de ramillete. Estas flores aparecen en todos los matices de azul, además de blancos, rosas y bicolores en formas simples y dobles, en forma de estrella, rizadas, con cresta o bordes ondulados.

La Saintpaulia ionantha florece a una temperatura regular de 18 a 24 ºC, y es muy importante evitar las variaciones bruscas, así como mantenerla protegida de las corrientes de aire y del frío.

Iluminación

La Violeta africana necesita un lugar muy luminoso, pero apartado de la luz directa del sol, que podría quemar las hojas y las flores, lo ideal es que la luz sea ligeramente tamizada.

Temperatura

La Violeta africana no tolera las temperaturas bajas, mucho menos las heladas. La temperatura mínima es de 12 ºC.

Sustrato

Utilizar un sustrato fértil, suelto y bien drenado. Una mezcla de tierra y turba le irá bien.

Violeta africana (Saintpaulia ionantha)

Riego

Las Violetas africanas son muy sensibles al exceso de agua; para regar el sustrato es mejor hacerlo desde la base de la maceta, llenando un plato con agua y dejar que la absorba desde las raíces, cuando pase una media hora se vacía el exceso sobrante que quede sobre el platillo. Los riegos en verano tienen que ser constantes, de forma que el sustrato esté siempre moderadamente húmedo, en invierno han de ser ligeros; es recomendable utilizar siempre agua sin cal y un poco tibia. Necesita una atmósfera permanentemente húmeda, nunca rociar agua sobre las hojas o flores ya que se pudrirían.

Abono

Abonar durante los meses de crecimiento. Diluya un fertilizante líquido en el agua de riego cada 15 días.

Reproducción

La Violeta africana es muy fácil propagar por medio de esquejes de hoja, se debe cortan las que estén más sanas y maduras con un trozo largo de tallo, se introducen en una mezcla de turba y arena gruesa a partes iguales, de modo que la base de cada hoja toque justo la superficie del sustrato. Se riega y se cubre la maceta con un plástico transparente al que hay que practicar unos pequeños agujeritos para la entrada y salida de aire. Se mantienen a una temperatura de unos 22ºC.

Al cabo de unas semanas alrededor de la base de la hoja se formarán varias pequeñas plantitas; cuando se desarrollen y sean lo suficientemente grandes para poder manipularlas se plantan en pequeñas macetas individuales y se tratan como plantas adultas.

También se reproduce por semillas y por separación de vástagos.

Cambio de maceta

Cuando vea que la Violeta africana haya crecido demasiado o que sus raíces ocupen toda la maceta será momento de cambiarla a una maceta de mayor tamaño o separar los vástagos y colocarlos en otro recipiente. Cuando la Violeta africana dispone de mayor espacio florecerá mejor.

Limpieza de hojas

Para limpiar la Violeta africana se utiliza un pincel seco y se pasa suavemente por cada hoja y entre los tallos, esta limpieza es conveniente realizarla aproximadamente cada quince días para mantener la planta sana.

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